martes, 11 de noviembre de 2014

Deuda externa.

¿La mayor estafa al pueblo argentino?
Los banqueros de Europa y los Estados Unidos pensaron que los países latinoamericanos, manejados mayoritariamente por dictaduras que no tendrían que responder ni ante la prensa ni ante la oposición, serían buenos clientes para sus créditos. Así comenzó un verdadero aluvión de préstamos por parte del país anglosajón.
La deuda externa es un instrumento que un país utiliza para crecer en base a un plan programado, estudiado, discutido y aprobado. La finalidad última de endeudarse es la de generar riquezas para el bienestar de los habitantes del país. Es la suma de las deudas que tiene un país con entidades extranjeras. Se compone de deuda pública (la contraída por el Estado) y deuda privada (la contraída por particulares). La dictadura de 1976 realizó políticas económicas de apertura al mercado de capitales extranjeros y generó que la deuda aumentara en un %400.
Por su parte, Alejandro Olmos, político, periodista e historiados argentino, estudió la deuda externa exhaustivamente y denunció la ilegitimidad de la deuda contraída con los organismos internacionales de crédito por parte de varios gobiernos argentinos, considerando que es la mayor estafa contra los argentinos porque esta deuda externa es una deuda  ilegitima. La denuncia fue iniciada en 1982 y se cerró en el 2000.
La investigación judicial, que contó con numerosos peritos de organismos oficiales y privados, además de locales y extranjeros, comprometió seriamente a las autoridades civiles y militares del gobierno de ese entonces, entre ellas, al ministro de Economía José Alfredo Martínez deHozOlmos impulsó la presentación de un recurso de amparo ante la Justicia para suspender el pago de 9.530 millones de dólares al Fondo Monetario Internacional. 
“Las deudas hay que pagarlas, las estafas no”, denunció Olmos. Los beneficiarios fueron algunos grupos económicos privados, como Macri, Fortabat, Pérez Companc, Techint, Soldati, Pescarmona, que contrajeron la deuda privada que más tarde sería estatizada con seguros de cambio. Esto es lo que incitó al historiador argentino a realizar la denuncia.
¿Cómo podía ser que los ciudadanos argentinos estén pagando una deuda que no contrajeron?. Esto se debió al endeudamiento de las empresas públicas en el exterior para conseguir dólares, que no utilizaban, y beneficiaron a empresas privadas con esos dólares a través del Banco Central. La posterior estatización de las deudas privadas obligó al gobierno a pagar por todos los préstamos que las empresas habían pedido y no reinvertido para generar mayores ganancias y así poder pagar sus deudas. “YPF, fue obligada a tomar deudas cada tres meses sin ninguna necesidad real. Es de destacar que a la compañía nunca llegaban esos dólares, se quedaban en el Banco Central”, acusó Alejandro Olmos.

La conclusión de la sentencia del juicio de la deuda externa argentina fue la siguiente: “Ha quedado evidenciado en el trasuntar de la causa la manifiesta arbitrariedad con que se conducían los máximos responsables políticos y económicos de la Nación en aquellos períodos analizados. Así también se comportaron directivos y gerentes de determinadas empresas y organismos públicos y privados; no se tuvo reparos en incumplir la Carta Orgánica del Banco Central de la República Argentina; se facilitó y promulgó la modificación de instrumentos legales a fin de prorrogar a favor de jueces extranjeros la jurisdicción de los tribunales nacionales.”


No hay comentarios:

Publicar un comentario